Sarah Longwell no intentó ni por un momento fingir que le caía bien Donald Trump.
La activista republicana y estratega política desde hace mucho tiempo, se opuso a su nominación para ser el candidato presidencial republicano en 2016 argumentando que Trump y las cosas que él representaba eran malas para ella y para su partido. Durante muchos años, ha llevado con orgullo la etiqueta “Never Trumper” [jamás apoyé a Trump].
En el…